Soy Ana y en noviembre de 2021 mi vida cambió radicalmente a peor. Voy a relatar, brevemente lo que me pasó. Comenzó con mareos. Me lo trataron como vértigos y a la vista de un TAC lo diagnosticaron como cavernoma en pedúnculo cerebeloso izquierdo que habia sangrado. En el hospital que estaba no me hacían nada, esperar. Busque otras opiniones, y al final me lo operaron. 8 horas en quirofano, 2 días en UCI. A las secuelas que ya tenía (inestabilidad, mareos, hemiparesia lado izquierdo) se le sumaron, vision doble y disminución de la visión (veo un 70% y borroso) molestias al tragar, incluso la saliva, que es lo que mas estrés me genera porque lo siento siempre. Agote la rehabilitación de la Seguridad Social y ahora la hago privadamente, lo que me supone un gran gasto No he mejorado mucho. No puedo salir sola a la calle. Necesito vuestro testimonio y atuda si teneis un caso similar. Gracias
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Hola Ana, me llamo Héctor y estoy operado de un cavernoma en el tronco cerebral en 2018.
Afortunadamente era singular (al menos en la zona de la cabeza) y aunque con secuelas similares a las tuyas, de las que algunas fueron desapareciendo o aminorando con el tiempo, el tiempo y la rehabilitación continua están ayudando, al menos, a una mejor adaptación a los déficits que parece que son permanentes (que son varios) en mi caso.
Mi consejo para ti y para todos los afectados en general, es que dediques el tiempo que puedas en tu vida a la rehabilitación y que conviertas eso en tu nuevo estilo de vida. En mi caso ya he interiorizado que es algo inacabable y llegados a un punto, en mi caso también dejé de tener rehabilitación por el sistema público, pero por suerte ya había alcanzado un nivel que me permitió sustituirla por ejercicios variados en un gimnasio o al aire libre. En realidad, todo lo que haces a partir de un punto puede considerarse rehabilitación porque siempre verás que tienes un margen de mejora en lo que haces y no hay otra que ir a por él.
Quiero decir que no tomes la rehabilitación como algo que tiene un fin. En realidad, aunque como yo, llegues a cierto nivel, algo más aceptable que al principio (hay que pelear mucho y darle tiempo para ello), el siguiente paso no es el final, quizás sea una adaptación de lo que hacías que te permita disfrutar más, pero nunca hay un final.
También es verdad que debes conocer tu «nuevo yo» e ir adaptando tu vida a las condiciones del momento. Eso te hará todo más llevadero. A los problemas, soluciones.
Para ahora mismo te recomiendo que te deriven a un médico rehabilitador. En mi caso, yo tuve uno, que me ayudó mucho, ofreciéndome la oportunidad de acceder a tratamientos rehabilitadores por el sistema público durante el tiempo que pudo ser.
El sistema público es bastante limitado en cuanto a tiempo que permite para la duración de un tratamiento rehabilitador, por eso debes tratar de conseguir lo máximo y aprovecharlo a tope y luego seguir y seguir, aunque sea de otra manera.
Un abrazo